El General Melgarejo : hechos y dichos de este hombre célebre
Por: O'Connor D'arlach, Tomás.
Tipo de material: TextoEditor: La Paz : s.e., 1925Descripción: 81,[3] p. ; 21 cm.Tema(s): Centenario | Independencia | BoliviaResumen: El gobierno de Melgarejo resultó devastador para Bolivia. Saqueó el tesoro público, centralizando los fondos públicos en una sola caja que manejaba él a su arbitrio; suprimió las municipalidades y decretó empréstitos forzosos que eran hechos efectivos con amenazas de muerte. Pronto se dio cuenta el país de que un caprichoso borracho lo controlaba todo "con la constitución en el bolsillo", como él mismo solía decir. Las protestas surgieron por todas partes, pero eran aplastadas una a una por la fuerza de un ejército al que le eran permitidos todos los excesos. El propio Melgarejo ejecutó, en la batalla de Cantería, al poeta Néstor Galindo y a otros destacados intelectuales. La vida humana no merecía para él ningún respeto.Tipo de ítem | Ubicación actual | Colección | Signatura | Estado | Fecha de vencimiento | Código de barras |
---|---|---|---|---|---|---|
Libros | Colección Simon Bolivar | Libros | CHB 920.02 OC18g (Navegar estantería) | Disponible No Dañado Disponible (No Restinguido) No Dañado | 2019-0565 |
Navegando Colección Historia de Bolivia Estantes , Código de colección: Libros Cerrar el navegador de estanterías
El gobierno de Melgarejo resultó devastador para Bolivia. Saqueó el tesoro público, centralizando los fondos públicos en una sola caja que manejaba él a su arbitrio; suprimió las municipalidades y decretó empréstitos forzosos que eran hechos efectivos con amenazas de muerte. Pronto se dio cuenta el país de que un caprichoso borracho lo controlaba todo "con la constitución en el bolsillo", como él mismo solía decir. Las protestas surgieron por todas partes, pero eran aplastadas una a una por la fuerza de un ejército al que le eran permitidos todos los excesos. El propio Melgarejo ejecutó, en la batalla de Cantería, al poeta Néstor Galindo y a otros destacados intelectuales. La vida humana no merecía para él ningún respeto.
No hay comentarios para este ejemplar.